Tu lista de deseos personales

En Estados Unidos existe la costumbre del ‘Baby Shower’ que cada vez es más popular entre nosotros. Pero, en lugar de cosas materiales, lo que suele hacer feliz a la mamá son pequeños detalles personales, tiempo y manifestaciones de cariño.

Tanto si celebras un baby shower como si no, te van a preguntar qué regalo quieres para tu hijo, tus amigos y familiares quieren darte una alegría y lo hacen con la mejor intención. Disfruta de la atención que te brindan, puedes dedicarle un tiempo a pensar tranquilamente qué te gustaría para ti misma y para el bebé.

Cuando el bebé llegue al mundo y pases las primeras semanas con él en casa tendrás que hacer frente a muchos nuevos retos. Dar el pecho, cambiar pañales y además hacer las tareas de hogar: comprar, cocinar, limpiar.... esos quehaceres pueden resultar bastante difíciles ahora que te estás adaptando a tu nuevo ritmo de vida así que sienta bien contar con el apoyo de los demás. ¿Qué tal si pides un poco de ayuda para esos primeros momentos? Los lunes una buena amiga puede traerte una sopa o algún otro plato ya preparado, los miércoles tu compañero del trabajo puede ir a verte a mediodía y traerte algo para comer. También puedes pedir que te ayuden con las tareas del hogar, ahora vas a pasar más tiempo en casa y quizá te des cuenta de que hace falta volver a limpiar las ventanas. Si alguien te regala este tipo de ayudas o si conocidos y familiares te obsequian entre todos con un vale para que contrates a una asistenta durante las primeras cuatro o seis semanas eso supondrá un valioso apoyo para los primeros días en casa con tu bebé. Otros vales útiles pueden ser: una comida a servicio de tu restaurante favorito o algo más práctico, un asesoramiento sobre portabebés para que más adelante puedas llevar perfectamente a tu hijo contigo.

Es bueno saber que puedes confiar en alguien. Te ayudará mucho tener personas a las que puedes llamar en todo momento para que te aconsejen personalmente. Quizá unos buenos amigos te sorprendan con un pequeño detalle, un masaje relajante de manos, pies o nuca mientras tu hijo duerme podría suponer un buen momento de descanso para ti. Si ya tienes hijos es estupendo que alguien se lleve a los hermanitos mayores por la tarde a la piscina o a hacer alguna actividad fuera de casa, así tendrás tiempo y tranquilidad para ti y para tu pequeño. Quizá también te apetezca ir a la peluquería con una amiga ya que durante el puerperio una tiene otras prioridades antes que pensar que en su corte de pelo, si cuentas con la compañía cariñosa de tu amiga y ella se ocupa del bebé mientras te peinan puedes disfrutar de un momento para ti. Te sentirás afortunada al ver que los demás te ayudan, no tengas reparo en pedir ese tipo de apoyo a tus seres más queridos, seguramente tu también lo harías o ya lo has hecho por ellos.

Tip: 

“¿Cuándo llegará por fin?” Casi todo el mundo quiere saber cuándo nacerá el bebé. Puede ser que la gente que te rodea te contagie su impaciencia. Si aún no has comunicado la fecha de parto prevista, simplemente retrásala dos semanas más, así podrás eludir la impaciencia de los demás y esperar el parto con más tranquilidad”.

Charo Martín,

Matrona de WELEDA y madre de tres hijos