¿Necesitan juguetes los niños pequeños?

Avalancha de juguetes y consumo. En nuestro ámbito cultural los niños están acostumbrados a tener muchos juguetes y a que les regalen constantemente juguetes nuevos. Pero ¿realmente necesitan todo eso los bebés, los niños pequeños y los más mayorcitos? ¿Cómo se puede estimular a los niños a través del juego y qué propuestas para jugar les podemos ofrecer?

Durante el primer medio año de vida el bebé no necesita juguetes. Duerme y mama y lo que quiere es recibir atención amorosa y cuidado atento. Tampoco son necesarios los móviles sobre la cunita porque sirven más bien para distraer la atención. No obstante, los niños juegan desde el primer momento. Por ejemplo, empiezan a juguetear con sus propias manos y pies y debemos permitir que disfruten con ello. Más tarde, cuando son algo más mayores, comienzan a observar con atención las siluetas que dibujan las luces y las sombras. Al principio todo eso les resulta suficientemente interesante y no necesitan ningún juguete.

Un doudou es un bonito juguete para los bebés y los niños pequeños. El niño puede abrazarse a él y, más adelante, utilizarla para esconderse. A los pequeños les encanta sentir el tacto de la seda con las manos y la boca y también restregarla por el rostro. Un muñeco de seda natural puede convertirse en su primer juguete y también es un buen sustituto del chupete porque se puede chupetear perfectamente. En general los objetos cotidianos son adecuados para jugar y experimentar. Una cuchara también es un objeto interesante para el niño. La siente fría en la boca y puede apretar las encías contra ella durante la fase de dentición. Más adelante los cacharros de cocina son interesantes como instrumentos musicales. Cuando el niño va adquiriendo movilidad las cajas pueden ser todo un reto, puede tratar de gatear sobre ellas arriba y abajo y practicar el avance y el retroceso.

La coordinación de los bebés y los niños pequeños todavía es muy insuficiente. Por eso es importante que los sonajeros, los aros para agarrar y en general los objetos que les damos para jugar no sean demasiado pesados. De lo contrario podrían, por ejemplo, golpearse la cabeza con ellos. Ponte al nivel del pequeño, existen muchas posibilidades para jugar perfectamente sin necesidad de juguetes:

• Desfogarse fuera de casa y fomentar el juego libre, simplemente con uno mismo y con lo que ofrece el entorno
• Coger piñas y flores y jugar con ellas
• Hacer sombras chinescas con los dedos
• Pintar, por ejemplo, con pinturas de dedos
• Implicar a los niños pequeños en las tareas de la cocina, les encanta ayudar a amasar
• Jugar o hacer música con fuentes, cucharas y otros utensilios de cocina.

Los bebés y los niños pequeños son curiosos por naturaleza y siempre encuentran algo interesante en muchas cosas normales y corrientes. Se puede jugar maravillosamente con los niños pequeños en la cocina, por ejemplo, utilizando las fuentes, las ollas y otros utensilios para hacer música. En general somos seres sociales y también lo son los niños, por eso les gusta jugar con otras personas. Además, la interacción permite desarrollar nuevas formas de juego. Depende del temperamento del pequeño, a algunos les gusta jugar tranquilamente consigo mismos mientras que otros necesitan más interacción. Para los niños es natural jugar con sus hermanos y con otros niños, no tienen que ser siempre los padres los que propongan o inicien un juego. Todo lo contrario, los pequeños suelen jugar libremente y es bueno darles esa posibilidad y el espacio necesario para ello.

Consejo: Resulta muy útil definir con la familia y los allegados la actitud básica respecto al tema juguetes y ponerse de acuerdo sobre los regalos. También hay muchos objetos importantes de uso cotidiano que se pueden regalar en lugar de juguetes, por ejemplo, zapatos o ropa. De todos modos, lo que más les gusta a los niños es abrir el regalo y rasgar el papel de colores que lo envuelve. También hay objetos naturales, como las piñas, que funcionan perfectamente como juguete.